Un pájaro de aire imponente despreciaba a una palomita y le decía: "Tú sólo comes granitos de arroz y de trigo. Ojalá fueses a mis banquetes para que te deleitaras." La palomita, sin embargo, no quiso ir.
¿Saben ustedes cuál era el banquete? El pájaro era un gallinazo, llamado también zapilote, zamuro o buitre de América. Y su banquete era una yegua muerta que estaba en el potrero.
El mundo también nos llama a participar en su banquete, y nos desprecia porque sólo queremos alimentarnos con las cosas sencillas y espirituales. ¿Pero saben ustedes cuál es el banquete que nos ofrece el mundo? La mortecina de la orgía vacanal, del placer sensual y de la perfidia.
¿Quién prefiere ese banquete, después de oír estas palabras de Cristo: "Yo soy el pan vivo que descendió del cielo; si alguno comiere de este pan, vivirá para siempre; y el pan que yo daré es mi carne, la cual yo daré por la vida del mundo."? (Juan 6:51)
Francisco Lievano